me encantó la atención d todos en el hotel, desde el personal del restaurante hast la recepción, super amables. la vista y la ubicación son brutales, súper tienen un vibe chido. la habitación dob le q tomamos era espaciosa y cómoda, ideal pa relajarse después d un día explorando. la piscina al aire libre fue un plus, y dsps d nadar uno puede chillax en el sol. además, el spa fue muy relajante y lo disfruté al 100%.

pero igual hubo ruidos molesto del estacionamiento y el arrastre de muebles d nco.

excelente acceso a atracciones y parques cercanos para explorar

disfruté mucho de la proximidad del hotel a varios lugares de interés como el Museo Maria Felix, que está a solo un corto paseo, y la Plaza de Armas, que se encuentra a menos de 20 minutos a pie, lo que me permitió sumergirme en la cultura local con facilidad.

el hotel tenía buenas instalaciones, pero el ruido del estacionamiento fue escandaloso, no dejándome descansar. además, esperaba algo especial por ser un huésped digno, como un regalo de bienvenida, pero nada. ah, y los muebles arrastrándose a la mitad de la noche, genial para una noche ininterrumpida. casi escribo una buena reseña, pero no pude.

La atención del personal fue excelente, pero el gimnasio tenía pocas máquinas.

Una estancia verdaderamente encantadora

Disfruté mucho de la cálida atención del personal, que siempre estuvo dispuesto a ayudar. La vista desde mi habitación era espectacular y la piscina al aire libre me permitió relajarme después de un largo día. Recomiendo probar los platillos del restaurante, ¡son deliciosos!

habitaciones amplias y muy limpias que impresionan

instalaciones limpias, habitaciones espaciosas

comodidades limitadas

una experiencia agradable pero con ruidos molestos

Las instalaciones eran realmente atractivas y limpias, me impresionó la amplitud de la habitación. Además, disfruté mucho de la piscina al aire libre, un lugar ideal para relajarme bajo el sol después de un día explorando.

Sin embargo, el ruido del estacionamiento y el movimiento de muebles en el restaurante interrumpieron mi descanso.

Las instalaciones estaban muy bonitas y limpias, y me encantó la amplitud de las habitaciones, además de que tenían un restaurante donde probé unos platillos deliciosos. Disfruté de la piscina para relajarme bajo el sol y del spa que ofrecía un servicio muy agradable. Solo noté algo de ruido al mover muebles en el restaurante, pero no me impidió descansar bien. 😊

La habitación que ocupamos era como un oasis, espaciosa y con aire acondicionado, perfecta para relajarse después de un día explorando. La piscina al aire libre fue un regalo inesperado, donde nadar en el sol era tan refrescante como un limonada fría en un día caluroso.

Insonorización limitada

La habitación doble que ocupamos era amplia y cómoda, ofreciendo un espacio suficiente para relajarse después de un día en el área. Además, logramos dormir bien después de la medianoche, ya que el ruido del restaurante cesó alrededor de las 11:30 pm.

Sin embargo, la insonorización deja bastante que desear. se escuchaban todos los ruidos del estacionamiento, desde las alarmas de los coches hasta las motos pasando por la calle principal. También, la habitación ubicada debajo del restaurante hizo que se escuchara bastante el arrastre de muebles, aunque esto se limitó a horas tempranas de la noche.